Tesoros de la calle

Cuadro
A partir de un marco de ventana con vidrio, pude complementar el pasillo, que de un lado es biblioteca. Yo quería algo colorido, pero a la vez sencillo. Y me gusta cómo quedó porque, a pesar del color, connota cierta gravedad. Y el marco así desprolijo se fusiona con la onda que tengo en otros muebles (un desprolijo chic). Lo limpié y lijé sólo un poco, lo encolé porque tenía las juntas flojas (este proceso lleva unas 12 horas, hay que atarlo con algo para fijar y esperar). Luego, pegué en la pared cuadrados de felpina con cinta de papel (vienen en formato del papel glasé, pero son de este material, lo compré en una librería que vende artículos retro). Como no medí (por atolondrada que soy), me quedó un poco asimétrico en la parte de arriba, pero alguien prolijo puede hacerlo a la perfección.


Macetero
Me encontré este canastito en un estado lamentable. Lo limpié con agua caliente, cepillo y detergente. Luego, lo barnicé (como pude, ya que tenía el pincel duro). Como debajo no tenía base y estaba despareja, con una sierrita las recorté y pegué el entramado suelto con pegamento de contacto. Después le puse un plato debajo y la ubiqué. Adentro, calcé una maceta con planta que tenía medio desparramada (por eso, enganché algunas ramas entre sí con esas tiritas que vienen en los paquetes de pan o similares). Le puse un gatito de madera y le agregué unas borlas (ovillitos) hechas en lana de colores.


Marcos de adorno
No es su ubicación definitiva, pero mientras tanto, me gusta cómo quedan ahí. Parece que tanto libros apilados como marcos vacíos están de onda. En este caso, limpié y puse Lysoform. Uno de ellos, el de yeso, tenía bordes saltados, por eso pinté de verde musgo, sin tratar de disimular la pintura. Le puse un osito que andaba por ahí para bajar el tono de solemnidad. También dejé una taza de porcelana que, de casualidad, había apoyado ahí un par de veces.



Cuadro-collage
A partir de un marco de ventana encontrado en un container, quedó esto, aún en vías de construcción. Lo pinté, adrede, así nomás con pintura acrílica negra (antes lo limpié y lijé un poco). Adentro, tiene pegado, con cinta bifaz y cinta de papel: discos de pasta pequeños, entradas a recitales pegadas sobre cartoncito de color, fotos personales (tuneadas en Picnik), posavasos, recortes de revistas, postales, gallito de madera autoadhesivo, carátula de materia (retro, original), publicidad de obras de teatro y hasta un espejito redondo (de 2 pesos) que tiene escrito (en fibrón en la pared): "Usted está aquí".


NOTA: quise sacar la cursiva porque no se lee bien y la soné, ahora me salen todos tipos de letras diferentes, qué feo, y no sé dónde tocar (eso que en la edición sale todo joya...).

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